Datos para tener en cuenta antes de tirarse al sol cual lagartos.
14.12.11
Estos son algunos datos sobre protección solar que quizás les sirvan antes de tirarse al sol:
La diferencia entre filtros solares "químicos" y "físicos". Los filtros solares físicos incluyen activos como óxido de zinc y dióxido de titanio y los químicos tienen oxibendazona, octylcrylene, octinoxate, octisalate, homobenzona, 4-MBC, mexoryl, avobenzona, uvinul y parsol por ejemplo. Si uds. tienen piel sensible, lo mejor es buscar un filtro solar físico y no químico, ya que estos últimos pueden generar sensibilidad. Se dice que los filtros físicos son mejores que los químicos, ya que si bien dejan una capa blanca en la piel, son más resistentes al sol que los filtros químicos, que apenas entran en contacto con el sol empiezan a degradarse más rápidamente que los otros.
Los mejores filtros son los que bloquean tanto rayos UVA como los UVB. Para recordar lo que producen en la piel cualquiera de los dos tipos de rayos, tenemos una regla mnemotécnica: los rayos UVB causan burning (quemaduras) y los UVA aging, envejecimiento.
La diferencia de protección solar de un protector con SPF 50 y otro con spf75 es de apenas un 0,6% más. Así que no se rompan la cabeza buscando el que tenga el numerito más alto. Con cualquier protector spf 50+ ya están lo suficientemente protegidas. Para que se den una idea, el spf 15 protege un 93% frente a los rayos UVB; el 30, un 97%; y el spf 50, 98%.
La cantidad recomendada de protector solar que deberíamos usar para el rostro es de 2mg/cm2, que es el equivalente a cubrir la primera falange de un dedo (desde la punta del dedo hasta la primera división). Sé que es mucho, pero también por eso se recomienda reaplicar seguido, ya que no todos van a colocar la cantidad suficiente de producto.
El filtro no debe ser esparcido en el rostro, tiene que quedar sobre la piel, no debe ser absorbido. Lo que si se debe hacer es aplicar con golpeteos o presionando sobre el rostro. Esperen unos minutos antes de colocar el maquillaje o la base.
Estamos expuestas a los rayos solares en cualquier lugar, no es necesario tirarse cual lagarto en la playa para mancharse, ir por la vereda del sol en pleno microcentro porteño es lo mismo. Tampoco sirve no estar directamente bajo el sol, sino que con el reflejo también nos bronceamos: el césped, el reflejo del agua y alguna pared blanca hacen que los rayos reboten y son igual de nocivos que los rayos "directos".
Al final del día, no se olviden de limpiar bien el rostro, ya que como el protector no se absorbe, queda sobre la superficie.
Eso es todo, no molesto más (por hoy) con el tema. Igualmente, les recuerdo que este post no suplanta una visita al dermatólogo para que las asesore mejor sobre los productos que tienen que usar en cada casi en particular.
Los mejores filtros son los que bloquean tanto rayos UVA como los UVB. Para recordar lo que producen en la piel cualquiera de los dos tipos de rayos, tenemos una regla mnemotécnica: los rayos UVB causan burning (quemaduras) y los UVA aging, envejecimiento.
La diferencia de protección solar de un protector con SPF 50 y otro con spf75 es de apenas un 0,6% más. Así que no se rompan la cabeza buscando el que tenga el numerito más alto. Con cualquier protector spf 50+ ya están lo suficientemente protegidas. Para que se den una idea, el spf 15 protege un 93% frente a los rayos UVB; el 30, un 97%; y el spf 50, 98%.
La cantidad recomendada de protector solar que deberíamos usar para el rostro es de 2mg/cm2, que es el equivalente a cubrir la primera falange de un dedo (desde la punta del dedo hasta la primera división). Sé que es mucho, pero también por eso se recomienda reaplicar seguido, ya que no todos van a colocar la cantidad suficiente de producto.
El filtro no debe ser esparcido en el rostro, tiene que quedar sobre la piel, no debe ser absorbido. Lo que si se debe hacer es aplicar con golpeteos o presionando sobre el rostro. Esperen unos minutos antes de colocar el maquillaje o la base.
Estamos expuestas a los rayos solares en cualquier lugar, no es necesario tirarse cual lagarto en la playa para mancharse, ir por la vereda del sol en pleno microcentro porteño es lo mismo. Tampoco sirve no estar directamente bajo el sol, sino que con el reflejo también nos bronceamos: el césped, el reflejo del agua y alguna pared blanca hacen que los rayos reboten y son igual de nocivos que los rayos "directos".
Al final del día, no se olviden de limpiar bien el rostro, ya que como el protector no se absorbe, queda sobre la superficie.
Eso es todo, no molesto más (por hoy) con el tema. Igualmente, les recuerdo que este post no suplanta una visita al dermatólogo para que las asesore mejor sobre los productos que tienen que usar en cada casi en particular.
Fuente imágenes: www.educima.com
